Orquídeas del Mar: una organización de trabajadoras sexuales
Orquídeas del Mar: an organization of sex workers
Fecha de recepción: 22 de enero de 2024
Fecha de aprobación: 1 de marzo de 2024
Katya Cecilia Cruz Rivera
Universidad de El Salvador
ORCID: 0009-0001-5996-159X
Imelda Arely Cruz Guerrero
Universidad de El Salvador
ORCID: 0009-0007-4029-6200
Resumen
Este es un estudio de Historia Oral acerca de la organización Orquídeas del Mar, realizado mediante conversaciones con algunas de las trabajadoras sexuales que la integran. A través de la memoria individual y colectiva de las experiencias de vida de estas mujeres, se ha obtenido el relato que da cuenta de la organización que las representa y las formas que tiene la venta de servicios sexuales en la sociedad salvadoreña. Al organizarse estas trabajadoras consiguieron estar unidas, reivindicar sus necesidades y problemáticas; también, lograron impulsar su lucha por el reconocimiento de sus derechos laborales y la eliminación de la denigración social a su trabajo. Esta investigación muestra un antes y un después de Orquídeas de Mar, respecto al lugar que encontraron, en el que son apoyadas y protegidas, que no son criticadas, ni tachadas con otros estereotipos.
Palabras clave: denigración y derechos laborales, experiencia de vida, memoria, orquídeas de mar, subjetividades, trabajadoras sexuales.
Abstract
This is an Oral History study about the organization Orquídeas del Mar, carried out through conversations with some of the sex workers who are part of it. Through the individual and collective memory of the life experiences of these women, the story has been obtained that gives an account of the organization that represents them and the forms that the sale of sexual services has in Salvadoran society. By organizing these workers, they managed to be united, to claim their needs and problems; They also managed to promote their fight for the recognition of their labor rights and the elimination of social denigration of their work. This research shows a before and after of Sea Orchids, regarding the place they found, where they are supported and protected, where they are not criticized or criticized with other stereotypes.
Keywords: denigration and labor rights, life experience, memory, sea orchids, subjectivities, sex workers.
Hay mujeres morenas, chelitas, altas, trigueñas, con caracteres diferentes, nos vimos reflejadas en las orquídeas porque hay diferentes tipos de orquídeas en el mar, son más de 200 tipos de orquídeas acuáticas que existen, por ello nuestro nombre, ya que en el trabajo sexual hay diversidad de mujeres
Hacer el trabajo lo mejor que se pueda, que sea de calidad y rapidez, porque todo empleado tiene que tener un salario y un reconocimiento al esfuerzo que cada uno hace, pero ante todo tiene que gustar y estar enamoradas de lo que hacemos. Esté temblando o esté lloviendo en nuestra casa, siempre debemos de salir, nos sintamos enfermas, nos sintamos como nos sintamos, tenemos que salir con nuestra mejor sonrisa
Reina de la paz
En El Salvador tratar temas respecto a la sexualidad y a las trabajadoras del sexo es un tabú. Pero, ¿a qué nos referimos? «se le conoce como trabajo sexual a aquella actividad donde se venden diferentes servicios sexuales».1 Un trabajo que en opinión de muchos es «fácil» e inmoral, pero desde la opinión de las trabajadoras fue difícil, debido a la discriminación, abuso y violencia sobre ellas. La metodología que se ha utilizado en esta investigación es la de Historia Oral, en la que por medio de las entrevistas a manera de conversación a algunas trabajadoras se obtuvieron relatos de su realidad y de subjetividades. En las conversaciones, las trabajadoras relataron sus experiencias con alegría cuando se referían a la superación o a la ayuda que habían conseguido y con tristeza cuando se refirieron a la forma en cómo la sociedad o la propia familia las trataba. Este es el caso de la directora de la organización, quien mostró tristeza cuando habló de los problemas que vivió cuando ejercía su oficio y expresó alegría cuando contó cómo se convirtió en un agente de cambio y de liderazgo entre las trabajadoras sexuales. De manera que, en este trabajo se ha logrado una perspectiva singular acerca del tema a través de la memoria que opera, tal como lo expresa Halbwachs, que la memoria individual y colectiva permite conocer nuevas perspectivas de la memoria, la cual no queda aislada; para recordar muchas veces es necesario apelar a recuerdos de otros o recuerdos en conjuntos.2
Orquídeas del Mar es una organización de trabajadoras sexuales fundada el 13 de octubre de 2005 en San Salvador, con el propósito inicial de instituirse para obtener condones gratis. Todo inició de acuerdo a María Raymundo, trabajadora sexual integrada en los años 2004 y 2005, cuando hubo escases de condones: Yo estaba en pleno trabajo sexual y necesitábamos los condones para no infectarnos de VIH o de otras infecciones de transmisión sexual. Comenzamos la lucha para conseguirlos y dijimos, organicémonos y vamos a ver si nos regalan condones y así fue como nos empezamos a organizar, luego la lucha fue por la continua violación a los derechos humanos de las mujeres trabajadoras sexuales. En situaciones como estas, Elena agregaría que otra razón para organizarse es la constante violación de derechos humanos por las instituciones policiales3.
Todo lo anterior fue logrado con la participación de muchas trabajadoras sexuales y con apoyos externos, un caso fue el doctor Rodrigo Simán, quien colaboró para desarrollar el tema de la integración, de la visión y misión de la organización. Poco tiempo después, la organización desarrolló una estructura interna, una división de tareas y deberes dentro del grupo y se impulsó una lucha más amplia por el reconocimiento de los derechos y la eliminación de la denigración, unos de los problemas centrales que viven. Una de las primeras acciones para protegerse de la violencia fue obtener un mejor sistema de seguridad con equipo electrónico como cámaras. También lograron conexiones con organizaciones latinoamericanas similares, como en el caso de la Red de Trabajadoras Sexuales de América Latina y El Caribe, fundada en Costa Rica en 1997. Trabajadoras sexuales salvadoreñas participaron en la primera reunión de esa red, en la que conocieron y compartieron con trabajadoras de 14 países de América Latina y el Caribe.
En esa reunión descubrieron que todas compartían realidades semejantes, que tenían las mismas necesidades y parecidos planteamientos de lucha: la defensa del derecho al trabajo sexual, el trato igualitario entre los géneros, la lucha por la no discriminación, la libertad y la salud sexual y reproductiva.4 Esta experiencia internacional permitió que la organización Orquídeas del Mar pudiera integrarse y recibir ayuda. El nombre de Orquídeas del Mar les gustó para nombrar a su organización por la similitud que encontraban entre ellas y estas plantas, en cuanto que hay una diversidad de orquídeas en el mar, de diferentes colores, tamaños y texturas igual somos las trabajadoras sexuales, podría haber grandes, chiquitas, gorditas, flaquitas, morenas, chelitas.5
Las orquídeas no se dan siempre, la flor que es de tierra no se da en lugares donde se pueda admirar, por lo general están en precipicios o en lugares bien remotos. Así es con las trabajadoras sexuales que a veces venimos de lugares remotos, del campo a la ciudad, buscando mejores oportunidades, y en el caso de la transparencia, también vimos similitudes, ya que en el mar hay mucha transparencia. Ver lo celeste del mar, nuestro mar celestito, nosotras las mujeres trabajadoras sexuales no utilizamos máscaras. Usted me conoce a mi como Coni, tal como soy, no me ando poniendo otra máscara aparentando lo que no soy6
En un principio Orquídeas del Mar realizó sus actividades de manera ambulante, aún no tenían una sede, pero tras organizarse lograron encontrar un local que lo pagaban con la cooperación de todas. Era una casita a la que le llamaban el «ratonero», un lugar que estaba cerca de la plaza Morazán, frente al edificio Morazán.7 El local de la organización ocupó un lugar importante para integrar a las trabajadoras, las iniciadoras trataron que se sintieran cómodas, que entre ellas no hubiera estigmas8. Recibieron apoyo del PNUD (Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo) con la donación de unas computadoras y se recibieron donaciones de materiales y muebles de otras organizaciones. Entre las mujeres pioneras de la organización se encontraban: Inés, Zuleyma del Carmen Molina, Ana Dolores Henriquez, Reina de la Paz Rubio y María Raymundo. Las pioneras fueron 12 trabajadoras, algunas de ellas formaron parte de la Junta Directiva, tal como lo comentó María9. La Junta Directiva debía estar conformada por ciertos tipos de perfiles que encajaran con la forma en como desempeñaron su papel, por lo cual, la organización ya sabía qué pasos debían de seguir, debido a que ya habían estado en otra organización más o menos, mostrando sus conocimientos de cómo funcionaban las cosas, entonces entre las 12 compañeras se buscó encontrar quienes tenían ese perfil para ejercer los cargos y comenzar los planes y objetivos.10
Entre las primeras actividades realizadas fueron unos talleres. En aquel momento las pioneras de la organización comenzaron a comprar muebles de oficina como escritorios, sillas, computadoras, entre otros materiales didácticos. Después empezaron a recibir donaciones de la OPS11, para ellas fue un gran beneficio, porque ya no salía de su dinero propio gastar para mantener en pie dicha organización. Tras esto comenzaron a integrarse nuevas compañeras, para que fueran parte de la organización de Orquídeas tenían que poseer ciertas características. La primera, es que tendrían que ser mayores de 18 años, tenían que ser trabajadoras sexuales que se consideren y se asuman como tales y por último, ser persona proactiva que quiera ayudar y participar en las actividades de liderazgo, mostrando que quiere estar dentro y no dejar que otras personas como profesionales les venga a dar órdenes, ya que son las que saben y entienden lo que está pasando con ellas.12
La organización además de la definición de los objetivos también definió su visión: ser una organización fuerte y unida donde las trabajadoras sexuales puedan luchar, hacer visibles sus derechos y llegar a ser mujeres posicionadas políticamente con voz y voto. Se buscó que las trabajadoras sexuales tuvieran confianza en ellas, que expresaran su solidaridad que las caracteriza. Rosa expresa que: «cualquier compañera que se acerca es escuchada y vemos cómo ayudarle a solucionar su problema. Algunas llegan llorando y algunas de nosotras, la que esté más a la mano le ofrece un café, un espacio privado donde ella pueda hablar, desahogarse, contarnos, ver si se le puede solucionar el problema, el apoyo mutuo es importante entre nosotras y queremos mantenerlo siempre, tanto como adentro como afuera de la organización. Es el compromiso institucional, dar sin esperar nada a cambio».13 Uno de los primeros propósitos de la organización fue lograr una ley en la que se reconozca el trabajo sexual como tal, los derechos como cualquier otro trabajador, el derecho al seguro social, derecho a acceder a una vivienda, a un crédito, en la AFP, a una jubilación digna cosa que hasta la fecha no se puede.14
Orquídeas del Mar además de integrar a trabajadoras sexuales, ha trabajado con personal profesional para algunas acciones dentro de un proyecto o participando en un evento de interés para la organización y sus participantes. A medida que la organización fue creciendo, comenzó a trabajar en conjunto con la alcaldía de San Salvador y con otras instancias teniendo muy claro que al trabajar en coordinación siempre se buscan beneficios para las compañeras.15 Lograron obtener documentación legal entre el 2009 y 2010 con apoyo del PNUD, que dio para pagar la publicación del Diario Oficial y otras gestiones legales de la organización. El trabajo contable se hizo más fácil cuando se contrató a un contador que les ayudaba hacer la cuentas, balances contables, pago de impuestos correspondientes, renta, entre otras cosas; para las trabajadoras esos asuntos financieros eran cuesta arriba, puesto que ninguna de ellas sabía ni cómo hacer un cheque.
Hoy en día la palabra «puta» ya no es tomada a pecho por las trabajadoras sexuales. Lo toman a broma entre ellas y dicen comúnmente «lo que entra por un oído sale por el otro». Ya no es un insulto. Pero sabemos que, reciben otro tipo de discriminación, la antropóloga Gloria Martínez menciona: «Siempre queremos ser políticamente correctos, por ejemplo, a una persona de color oscuro no se le puede decir “negro” porque él te dice que estas siendo racista, pero entre ellos si se pueden decir negro.»16 Eso mismo sucede entre las trabajadoras del sexo, con la palabra puta, si se los dice alguien fuera del grupo de ellas, sí lo consideran un insulto, pero dicho entre ellas no. Respecto a la atención en las instituciones de salud pública donde se debería de dar ayudar a las trabajadoras sexuales, están influidas por las etiquetas de la sociedad sobre estas trabajadoras. Algunos relatan situaciones comunes que enfrentan: «uno va a la unidad de salud a pasar consulta y regresa con depresión». Se les acusa de muchas cosas, además de estar alcoholizadas todo el tiempo.
Si la salud es pública y pagamos impuestos para ello, ¿por qué tienen que tratarnos diferente? Si ellos no están de gratis, ellos no están haciéndoles un favor a nadie. Favor es que fuera así como las monjitas verdad por pura caridad, pero no, ellos tienen un salario para atender17.
Es como que no les gusta hablar de esos temas, porque yo por ejemplo, soy de las que no me quedo callada y a veces es como la impotencia, vaya no sé si vieron las noticias que la semana pasada o hace dos semanas en la flaca que es una cervecería que está en Ciudad Arce asesinaron a una bailarina de 37 años, era una mujer muy hermosa que a pesar de sus años hacía unos shows espectaculares y la asesinaron sin qué ni por qué y nosotros qué podemos hacer como organización.
No podemos hacer nada, porque si hacemos algo, exponemos a todas las compañeras, ya que andamos en lugares peligrosos. Lamentablemente, no podemos hacer nada, eso te llena de impotencia, de coraje al no poder hacer nada y son casos que nunca se van a resolver, porque quedan impunes, porque a nadie le interesa. Entonces eso si es como muy doloroso, aunque no me guste es como la parte dolorosa de perder a personas que conoces que sentís un afecto por ellas.18
También reciben discriminación y señalamientos en la familia, algunas no les cuentan a sus hijos donde trabajan. Los señalamientos hechos por sus familias les lastima más que los recibidos por otras personas. Esa es una de las razones por las cuales muchas trabajadoras sufren depresión y llegan a consumir drogas o alcoholizarse. Un ejemplo de este caso es el de la directora, la cual cuenta su experiencia con su hijo:
Mi hijo mayor llegó a la edad de 17 años y yo no le había dicho que yo era trabajadora sexual, el otro muchacho que era menor me descubrió. Un día por una casualidad de la vida me llegó una citación del juzgado a mi casa, porque yo tuve un problema con una pareja. Mi hijo lo vio y me lo llevó al centro donde trabajaba y yo como he sido muy amante de leer el periódico o libros, tenía esa buena costumbre de leer mucho y estaba leyendo el periódico, agachada en la cama donde trabajaba y de repente, veo a mi hijo y como este no me decía nada yo no le decía nada, lo vi de reojo sin verle la cara, cuando vi que no se quitaba y le digo:
–¿Qué andas haciendo? – y me dice: –es que le traigo una razón–, yo le dije: – pasa adelante–, pero yo sentía que el piso se fue para abajo y no tenía valor de decirle y explicarle acerca de mi trabajo y sólo le pregunté algunas cosas que no tenían nada que ver.
–Ya me voy–, me dijo el niño
–Vaya hijo – le dije, ahí llegó tal día a la casa, porque no llegaba a la casa todos los días, porque me gustaba recoger la plata, porque cuando los niños están estudiando hay que recoger dinerito todos los días, porque es un gasto y cabal el lunes llego a la casa, pero no me tocó el tema, no me dijo nada, se contuvo.
Mi hijo se graduó en el Colegio Siglo XXI, de San Martín, ahí había un anfiteatro y allí fue la graduación, después de que le dieron el diploma y del reconocimiento del primer lugar, pues era aplicado y lo es hasta la fecha. Después de su graduación hablamos, aún no estaba en la organización, le pregunté:
– ¿Cómo te diste cuenta? – y me dice – es que yo la empecé a seguirla un día que usted andaba por aquí y vi que iba para abajo–, y le dije: –¿por qué no me dijiste nada?
– No, me dijo, pero mire madre yo le agradezco que se haya sacrificado por mí, este primer lugar que me saqué, me lo saqué dándole las gracias y por eso he sido aplicado para que usted se sienta orgullosa y por el trabajo que usted realiza no se sienta mal, porque acá le estoy demostrando cuánto vale usted para mí.19
Por otra parte, se encuentran los casos de violencia contra las trabajadoras sexuales. Uno de ellos, es el de Reina Cruz, ella fue víctima de violencia mientras ejercía su trabajo, recibió dos balazos. El incidente la dejó mal de las piernas, ella al razonar y pensar sobre lo que le había pasado, comprendió que eso era parte de la vida violenta que se vive en esta sociedad. Otro problema que enfrentan es el de las pandillas, las zonas donde están las casas de citas o los cuartos de alquiler están en zonas en las que transitaban las pandillas. Cuando tenía que recibir una visita de uno de ellos lo hacían con miedo. Y es que, en cuanto al cuidado o resguardo, la organización no cuenta con seguridad personal solamente con el cuido entre las mismas trabajadoras.20
Varias trabajadoras de Orquídeas del Mar entrevistadas relataron que, están contentas con su trabajo, que si tuvieran la oportunidad de volver a nacer seguirían siendo trabajadoras sexuales. Debido a que, ese oficio les dio grandes oportunidades, ser capacitadoras, ser parte de una organización y tener aceptación y cariño en un grupo. Además, como mujeres les ha permitido tener el control del nacimiento de sus hijos, el conocimiento de su cuerpo y la posibilidad de obtener la subsistencia para sus familias. Muchas de estas mujeres entraron al trabajo sexual, porque no eran mujeres preparadas de forma académica, sino que eran mujeres comunes, con un nivel académico muy bajo, a las que no les darían trabajo, y si les daban eran trabajos de casa como lavar trastes o de «sirvientas» eso no quiere decir que para ellas fueran trabajos denigrante, pero no les ofrecían un calidad de vida, no quiere decir que se ganara mejor como trabajadora sexual, pero era una mayor entrada y un mejor nivel de vida.21
María Raymundo, quien desde el año de 2013 es directora y figura central en Orquídeas del Mar fue trabajadora sexual que tuvo una vida laboral y personal complicada. Todo comenzó en su infancia, al interior de una familia muy pobre, su padre era alcohólico y todo lo que ganaba se lo gastaba en la bebida. Por lo que, a los dieciséis años buscó una vida sin pobreza como les había tocado a sus padres. Sus primeros trabajos fueron de mesera y más adelante trabajó en una casa de citas. Llegó a ese trabajo no porque la obligaron, sino que fue por su propia decisión, necesitaba llevar dinero a su mamá y a su hijo. A la casa de citas en la que trabajaba llegaban hombres con dinero y las mujeres que ofrecían sus servicios estaban muy bien pagadas. Así, ella pudo no sólo llevar dinero a su casa, sino también pudo comprar ropa y cositas bonitas.
La época de la guerra no fue tan mala para ella y sus compañeras, tenían ganancias, debido a la llegada de más clientes. Entonces María hizo cambios, dejó de trabajar en la casa de citas y comenzó a trabajar aparte, en un cuarto pequeño que rentó, en el que la clientela aumentó más de lo que tenía en la casa de citas y es cierto que le quedaba más dinero, pero también más cansancio. En esa época conoció a Flor de Piedra, una asociación que le sirvió como impulso para buscar una mejora en su vida y en la vida de las trabajadoras sexuales. Allí se enteró de la situación precaria de muchas mujeres jóvenes que abandonaron sus estudios o querían tener independencia, a las que sus padres no podían darles lo necesario; y otras, que no tenían lo suficiente para sostener a sus hijos. Un ejemplo de ello es el de Rosita:
Yo estuve en drogas entonces, venía aquí toda peda, sí había tenido noches locas donde terminaba de tomar a las 7 de la mañana. Pero me entró pena, fue así que me hizo recapacitar que eso no me traería ningún beneficio. Y no era parte del trabajo, era parte del hobby. Así bien es cierto estoy fichando, pero no me están pagando por oler la coca, yo no estoy trabajando en eso. Entonces si fue un cambio muy positivo, porque sin grupos de autoayuda, sin nada que se le parezca dejé de fumar, dejé de usar drogas, entonces ese es un cambio positivo para mí, para mi familia y para mi hijo también, porque no me ve en ese estado, verdad. No como en aquel entonces que yo llegaba con unas grandes gomas.22
Hacia el 2013, se comenzó a ejecutar un proyecto nacional con apoyo de la Red Trasex. Se logró que las apoyaran con un financiamiento considerable para invertir en el funcionamiento y proyectos de la organización. Para este momento la organización ya podía manejar fondos. Este desarrollo permitió que se lograra dar una mejor cobertura, así se logró que las trabajadoras del interior del país y del campo tuvieran el apoyo. Según María, en el territorio salvadoreño hay unas once mil mujeres que son trabajadoras sexuales y que se encuentran en diferentes negocios.23 Sistemáticamente, organizaron reuniones de carácter nacional, en las que participaban de 40 a 60 mujeres de Sonsonate, Santa Ana, San Salvador, Usulután, San Miguel, La Unión y de otros departamentos24. Como eran muchas se reunían en parques, cafeterías y en otros espacios públicos25. Con el tiempo se logró tener locales de la organización en Santa Ana, la cual era una casa grande con 4 educadoras y unas supervisoras, algo parecido se logró en Sonsonate.
Con el pasar del tiempo la organización fue sumando más apoyo de instituciones como: el Ministerio de Salud, el Fondo Global de Mujeres, Fondo Centroamericano de Mujeres, Fondo Global, Atlacatl Vivo Positivo, Red de Trabajadoras Sexuales de América Latina y El Caribe (RedTraSex) de la que forman parte, entre otras. Ya para el 2015, la organización formó parte de una red nacional aglutinando a otras organizaciones de trabajadoras sexuales (junto a OTS-ES, Asociación de Mujeres Flor de Piedra y Asociación de Mujeres Liquidámbar). Estas organizaciones trabajan de forma colectiva con el propósito sobre todo de disminuir la inseguridad de los lugares de trabajo. Además, continuar la lucha por los derechos laborales y humanos, y por la violencia continuamente sufren por ser mujeres y de ese oficio.26
El trabajo realizado las llevó al reconocimiento internacional y comenzaron a tener participación en los proyectos de la Red y proyectos del Fondo Mundial. El primer proyecto relacionado con la Red Latinoamericana no se logró llevar a cabo, por tal razón se volvió a intentar por segunda vez. Para el segundo año, empezaron a hacer el mismo proyecto, esta vez fue aprobado, obteniendo una cantidad de dinero muy significativa para la Red, el monto fue de un aproximado de 12.5 millones. Con esos 12 millones y medio la Red Latinoamericana dio fondos a proyectos presentados por cada país integrante de la red.27 El fortalecimiento logrado mejoró el liderazgo de la organización y abrió puertas. Eso no significa que no enfrenten problemas. Sistemáticamente enfrentan a la policía, desde un inicio llegaban al local a intentar detenerlas –por ser trabajadoras sexuales activas–. Eso sucede mucho en el campo. Muchas trabajadoras del campo que son o no de la organización eran visitadas en sus lugares de trabajo. Varias veces estas mujeres fueron detenidas sin deberle a nadie, ya que su delito era intercambiar sus servicios sexuales por dinero un «trance» como se dice. Una transacción donde, «tú me das eso y yo te doy, yo te presto mis genitales en algún momento». Muchas de esas acciones de la policía han sido tratándolas de malas maneras y con agresiones.28
Este trabajo ha mostrado las formas de organización que han desarrollado las trabajadoras sexuales. Esa ha sido una necesidad por el trabajo que realizan de manera desprotegida de la seguridad social, del abuso, de la violencia y de la denigración. Se ha mostrado lo positivo de su organización, pues con ello incidieron en la visión que tienen las instituciones y la sociedad sobre ellas, también lograron desarrollar capacidades y que fueran activas ante sus problemas y para impulsar sus luchas. Al hacer esta investigación sobre un tema poco estudiado, se logró ver que la sociedad salvadoreña no tiene mucha información sobre las trabajadoras sexuales, sobre la prostitución o problemas que tienen que ver con la sexualidad. Se han mostrado las tendencias que afectan a estas trabajadoras, como el machismo y las ideas religiosas, que ven ese oficio desacreditado y tachado. Las trabajadoras sexuales actualmente, ya no se sienten excluidas, es más, su formación académica a manos de la organización ha hecho que ellas se empoderen y logren ver que ellas como muchas personas tienen los mismos derechos y deberes.
Referencias
Entrevistas
María Raymundo. Entrevista realizada el miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar por Katya Cruz.
Gloria Martínez. Entrevista realizada el jueves 6 de junio de 2019/ UES, por Katya Cruz.
Rosita. Entrevista realizada el miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar, por Imelda Cruz.
Reina Cruz. Entrevista realizada el miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar, por Imelda Cruz
Carbajal Chavez, Traycy Carobitsy y Altagracia Esperanza Domínguez de García «Trabajadoras del sexo y Políticas de Desarrollo Social En Materia Laboral-Familiar Lo Difícil de la vida fácil» Licenciatura en Trabajo Social, Universidad de El Salvador, 2009.
Halbwachs, Maurice. «Fragmento de la Memoria Colectiva». Athenea Digital, N.° 2 (2002): 1-11.
RedTRasex. «Situación de los Derechos Humanos de las trabajadoras sexuales en El Salvador.» (2018).
Reynaga, Elena. «Historias de Trabajadoras Sexuales». RedTrasex (9).
1 Traycy Carobitsy y Altagracia Esperanza Domínguez de García Carbajal Chávez, «Trabajadoras del sexo y políticas de desarrollo social en materia laboral-familiar lo difícil de la vida fácil» (Licenciatura en Trabajo Social, Universidad de El Salvador, 2009). Para el caso salvadoreño el trabajo sexual sigue siendo considerado una actividad ilícita, debido a que no está penalizado o prohibido por la normativa primaria en el marco legal nacional, sin embargo, tampoco se considera una actividad reconocida legalmente en el país por no estar regulada o legalizada como trabajo.
2 Maurice Halbwachs, «Fragmento de la Memoria Colectiva» Athenea Digital, N.° 2 (2002): 3.
3 Elena Reynaga, «Historias de trabajadoras sexuales» RedTrasex: 54.
4 RedTrasex, «Situación de los Derechos Humanos de las Trabajadoras Sexuales en El Salvador», (2018): 2.
5 Rosita. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Imelda Cruz.
6 María Raymundo. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Katya Cruz., 2-3.
7 Reina Cruz. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Imelda Cruz., 32.
8 María Raymundo. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Katya Cruz., 9.
9 María Raymundo. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Katya Cruz., 3-8.
10 María Raymundo. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Katya Cruz., 4.
11 OPS significa Organización Panamericana de la Salud.
12 María Raymundo. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Katya Cruz.
13 Rosita. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Imelda Cruz.,27.
14 Un ejemplo de ellos fue una trabajadora sexual que intentaba sacar un préstamo del Fondo Social para la Vivienda, a la cual le preguntaron dónde trabajaba, ella respondió que en una cervecería. Tras esto le preguntaron, ¿cuál es su cargo?, respondiendo mesera debido a que, obviamente, no era reconocido el trabajo sexual, después de esto el entrevistador le respondió que estaba bien y más tarde le dijo que llegarían a buscarla. Este hecho se hizo verdadero encontrándola ejerciendo sus servicios haciendo que, el crédito fuera denegado. También, mostrando que no había ninguna razón por la cual no pudiera cubrirlo económicamente o algo más así de simple y que sencillamente era por el estigma que le tienen al trabajo sexual.
15 Rosita. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Imelda Cruz., 18.
16 Gloria Martínez. Jueves 6 de junio de 2019/ UES. Katya Cruz.
17 Rosita. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Imelda Cruz.
18 Ibid.
19 María Raymundo. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Katya Cruz., 13.
20 Reina Cruz. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Imelda Cruz., 34.
21 Reina Cruz. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Imelda Cruz., 33.
22 Rosita. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Imelda Cruz., 26.
23 María Raymundo. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Katya Cruz., 12.
24 Rosita. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Imelda Cruz., 18.
25 Reynaga, «Historia de trabajadoras» 54.
26 Ibid.
27 María Raymundo. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Katya Cruz., 6.
28 María Raymundo. Miércoles 29 de mayo de 2019/ Local de Orquídeas del Mar. Katya Cruz., 10.